Una herencia viva en manos del buen gobierno
«La cancha ya está del lado de la transparencia para el pueblo«. Con esta frase, Norma Julieta del Río Venegas, ex comisionada del Instituto Nacional de Transparencia (INAI), selló uno de los momentos más simbólicos de la vida institucional reciente de México: la entrega oficial de la Plataforma Nacional de Transparencia a la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno. Una transición que, lejos de pasar desapercibida, encierra un dilema profundo: ¿está garantizada la continuidad del acceso a la información en el país?
INAI: un cierre con legado
El INAI, organismo clave en la garantía del derecho al acceso a la información pública y la protección de datos personales, fue oficialmente disuelto. Sin embargo, su legado no desaparece, sino que cambia de manos. La Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno recibe la responsabilidad de gestionar uno de los instrumentos más poderosos de vigilancia ciudadana: la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT).
«Fuimos ordenados»: la entrega que marca historia
En entrevista con Sergio Sarmiento y Lupita Juárez, Del Río explicó que la transición se formalizó con un acta de entrega-recepción hace apenas ocho días. Afirmó que:
«La plataforma nacional de transparencia se entregó viva, sana y con miles de documentos y recursos pendientes.»
La frase no es menor. En un contexto de desconfianza institucional, la afirmación de que la plataforma está operativa y con información disponible es una declaración de intenciones.
Transición y vigilancia: 30 días críticos
Julieta del Río detalló que la nueva Secretaría tendrá 30 días para revisar la entrega y reportar irregularidades. Este plazo, que parece técnico, es crucial para asegurar la integridad del proceso. Si hay inconsistencias, los órganos de control podrán intervenir.
Cifras que importan: 130 mil recursos pendientes
Uno de los puntos más sensibles de la entrevista fue la referencia a los 130 mil recursos en espera de resolución, acumulados entre el 20 de marzo y el 11 de mayo. Estos recursos representan solicitudes de información negadas que esperan respuesta.
«Trabajo habrá mucho, habrá que esperar al 3 de junio porque es cuando los plazos deben obligar a las instituciones a contestar.»
El 3 de junio se convierte así en una fecha clave para evaluar la eficacia del nuevo ente.
Un derecho bajo la lupa
El acceso a la información en México ha sido un pilar de la democracia reciente. La desaparición del INAI genera incertidumbre, pero también abre una oportunidad: fortalecer la transparencia desde una visión integral anticorrupción.
Lo que está en juego
- La confianza ciudadana en las instituciones
- La continuidad del derecho a saber
- La operatividad de la plataforma nacional
La Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno no solo hereda una herramienta digital, sino un compromiso social.
¿Una transición o un punto de quiebre?
Lo que ocurra tras el 3 de junio marcará el rumbo de la transparencia en México. Si la nueva Secretaría responde con eficacia, podrá consolidar una nueva etapa. Si falla, la ciudadanía podría percibirlo como un retroceso democrático.El derecho a saber no se entrega, se defiende. Ahora la responsabilidad recae en un nuevo actor. Y el reloj ya está corriendo.