Violeta Isfel, conocida por su carisma en la televisión mexicana, se encuentra en el centro de una controversia por cobrar fotos y saludos personalizados. La actriz no se esconde: responde firme y con argumentos.
El origen de la polémica: una selfie que nunca fue
Todo comenzó tras su visita al programa De primera mano, donde promovió la obra teatral La señora presidenta. Según el periodista Gustavo Adolfo Infante, Violeta se negó a tomarse una fotografía con la maquillista del programa, quien habría pedido una imagen dedicada para su hija, fan declarada de la actriz.
El motivo de la negativa: Violeta argumentó que las fotos y saludos personalizados forman parte de un servicio disponible en sus redes sociales, el cual tiene un costo de 300 pesos por video.
Violeta Isfel responde: «Esto sigue igualito desde hace cinco años»
En un encuentro con medios, retomado por el reportero Eden Dorantes, Violeta Isfel se mostró serena pero firme. Aunque evitó entrar en detalles, dejó claro que su negocio seguirá funcionando como siempre.
«Todo lo que tenía que decir ya lo tienen… eso sigue de la misma forma, desde hace cinco años se venden estos video saludos personalizados», afirmó la actriz.
La también cantante destacó que su público siempre ha tenido acceso a esta información a través de su Facebook, donde especifica precios y condiciones de entrega.
Un modelo de negocio cada vez más común
Cobrar por saludos y contenido personalizado no es nuevo. Actores, influencers y deportistas recurren a este modelo como fuente adicional de ingresos. Plataformas como Cameo han consolidado esta práctica a nivel global.
Isfel simplemente formalizó algo que muchos ya hacían de manera informal: monetizar el vínculo emocional con sus fans.
El debate en redes: apoyo y críticas divididas
Como suele suceder, las redes sociales encendieron el debate. Algunos usuarios defendieron su derecho a cobrar por su tiempo y talento, mientras otros la tacharon de «lucrar con su fama».
Comentarios destacados en redes:
- «Es su tiempo y su imagen. Tiene derecho a cobrar».
- «Eso debería ser gratis para los fans que la siguen desde niña».
Esta división refleja una tensión más profunda sobre los límites entre celebridad y público.
Regreso a los escenarios y sueños musicales
A pesar de la controversia, Violeta Isfel ha retomado con fuerza su carrera artística. Participa en el 2000’s Pop Tour, donde compartió escenario con excompañeros de Atrévete a soñar, retomando su icónico papel de Antonella.
El deseo de colaborar con Danna Paola
En este contexto, Violeta también reveló su deseo de volver a cantar junto a Danna Paola:
«Yo sería la más feliz, a mí me encantaría», declaró al referirse a la posibilidad de compartir escenario con la cantante y actriz.
Aunque Danna estaría ocupada, la puerta no está cerrada.
Una figura que no se doblega ante la crítica
La actitud de Violeta Isfel deja claro que la autonomía sobre su carrera es innegociable. Su mensaje es contundente: su público merece respeto, pero también transparencia.
En una era donde los límites entre lo público y lo privado se diluyen, Isfel elige profesionalizar su relación con sus seguidores.
¿La pregunta que queda en el aire?
¿Estamos listos para aceptar que los artistas también son emprendedores digitales?
